TAREA 1 – APRENDER A OBSERVAR

 

La mirada como llave que abre la puerta del arte.

La memoria es un mecanismo de inteligencia y la propia memoria se nutre de la mirada. De una manera de ver que va más allá y que se adentra en comprender.

La memoria, como dice Antonio Miguel Cuenca Escribano, no es un almacén de imágenes si no un lugar donde las depositamos temporalmente para llamarlas cuando necesitamos combinar conceptos usando elementos visuales.

 Por ello creamos mapas sinápticos, lugares con referentes, tanto visuales como indicativos. Aprender a usar esos mapas nos permiten situar nuestra creatividad dentro de un contexto.

La otra mirada propuesta en la primera tarea trata de incorporar nuevos referentes sobre lo ya conocido.

Hay unas reglas de proporciones que son muy útiles para sacar fotografías y también para hacer composiciones de cualquier tipo.

La primera es la regla de los tercios y se trata de situar el objeto dentro de un tercio, no en el centro del encuadre, así provocamos una mirada hacia ese lugar por parte del espectador.

El otro encuadre tiene de nombre “la proporción áurea” y es el dibujo de la derecha. Muchos procesos de crecimiento de la naturaleza siguen ese patrón y es muy útil para situar objetos en un espacio.